Nota La Nacion Por Constanza Bertolini
Música para bodas
El debut discográfico de Microesfera, Ilusión , juega con lo naíf y lo irónico de ciertas celebraciones. Capri, Lamas y Cohn son algunos de los invitados del álbum.
Como los casamientos o las fiestas de 15, el primer álbum de Microesfera es una Ilusión . Un disco que juega con los Sueños de una Cenicienta o de una Niña bonita, durante (¡vaya casualidad!) 15 tracks. Manteniendo permanentemente este doble filo entre lo naíf y lo irónico, el nuevo trabajo de la dupla electrónica que integran los productores Alejandro Amo y Ramiro Larrain es, a todas luces, bailable y conceptual. «Es nuestra Ilusión de cambiar las cosas, de demostrar que en la electrónica se pueden hacer buenas producciones, con sello propio, sin negocios detrás y reuniendo artistas, para que la escena evolucione. Una utópica inocencia que encaja a la perfección con lo naíf «, explican.
Tramo a tramo, y a modo de DJ set (sólo por su carácter de «enganchado»), Ilusión construye a partir de sus títulos un imaginario apoyado en las cintitas de una torta de crema o en las flores de un ramo blanco y negro tirado en la tapa (fotos que tomaron prestadas del álbum nupcial de una pareja amiga). » El disco parte de todas esas celebraciones sociales que tienen un nivel de ridiculez increíble -sigue Ramiro-. Nos fascina, culturalmente, la chica vestida de hada que entra con un tema y produce un estado de ensoñación, un halo de ilusión que siempre está, también cuando se trata de una realidad que puede ser decadente».
Microesfera 